¿Cómo encontrar el punto de inflexión entre lo que soy y lo que fui,
entre lo que soy y lo que quiero ser?...
recuerdos fragmentados
cuerpos fragmentados,
misterios
andanzas.
silencios.
corazones en un compás descompensado,
¿cómo llegarle a quien no quiere que le llegues?
¿siendo vos?,
¿dejando salir lo que se siente?, ¿o al contrario, cerrando las puertas, como respuesta al cierre, para que entiendan que si no dan no reciben?...
y algo de cierto hay, que "cada uno da lo que recibe y luego recibe lo que da"...
y es la ley del equilibrio,
de la armonía del sentirse bien,
pero eso del ojo por ojo y diente por diente, o el pago con la misma moneda,
¿no es algo muy drástico? ¿muy violento?.
Si yo quiero dar, por más de que no me den, me hago cargo.
¿me hago cargo?
sí.
del miedo, vaya un@ a saber miedo a qué, pero suele haber miedo. ¿al rechazo?... posiblemente, pero el tema no es el rechazo del otro, el tema es el propio. ¿Nos rechazamos?
de la sensación de vulnerabilidad, de estupidez (del juicio que repentinamente me sale como censura al seguir mostrando mi interior)... cuando hay a quienes les gusta más el sarcasmo que la sinceridad o la verdad.
pero me hago cargo, soy verdadera.
doy lo que tengo,
ni más ni menos.
esto es lo que soy.
Y en eso me vuelvo a centrar y a respirar hondo.
mis palabras son claras,
mis pasos tranquilos,
mis silencios,
espacios para descansarme y descansarlos.
mis búsquedas, encuentros,
mis encuentros, nuevos misterios.
La risa, festejo.
El llanto, tristezas sólidas alejándose.
El abrazo fusión para reconstruirme.
Aparte, volviendo al dar y recibir, un@ siempre recibe,
estamos en constante intercambio y comunicación,
porque somos seres que creamos vínculos,
seres sociales que le dicen...
vivimos en grupos,
en contacto,
por más que ese recibir no sea el que se espera.
Y ahí está el punto, capaz haya que aprender a no esperar.
Y también, a respetar lo que se siente cuando lo q confluye repercute en un@,
no es cuestion de valoración:
no hay bueno o malo.
lindo o feo.
es la vibración,
es cómo te sentís y si te hace bien,
si vos a vos mism@ te hacés bien.
¿Entonces, cómo llegar a vos mism@?
Date tiempo... suena trillado lo sé, pero más que a vos, me lo digo a mí.
¿querés entrar en vos y caminarte para desfragmentarte?
Los puntos a veces son de inflexión y a veces son simplemente puntos,
que estando uno tras otro forman la linea/camino por la que caminando te descubrís.

Y sí, estoy llegando al punto de inflexión donde empiezo a estar segura de mí.
Alégrense por mí.
Me llevó eternos pasos.
y aún quedan un par para desplegarse mientras sueño...
buenas noches.
(l@s abrazo hasta que lleguen a su propio punto de inflexión).